ARCHIVO DE BALVANERA

martes, 17 de febrero de 2015

MARTES 17-FEB-2015 (AÑO 1-N°2)

Estamos en un año electoral donde los candidatos nos dan promesas que son bonitos espejos de colores que deforman nuestra identidad: Nosotros queremos ser de Balvanera, no queremos convertirnos en un San Telmito turístico. Nosotros vivimos acá, no somos carne de exhibición, queremos vivir bien, limpios, sin discriminación, sin drogas y sin menores prostituyéndose. Apostamos a la puesta en valor del barrio, pero eso no implica volvernos los sirvientes electorales; Sea quién sea que gobierne tiene que sentir nuestra presión ciudadana!

 BALVANERA SE EXPANDE
 La noticia es extra oficial, y refiere a que existen algunos sectores de la ciudad que están tan influenciados positivamente por Balvanera que, sus habitantes, desearían en un plazo inferior a 10 años mudarse a nuestro barrio. Puntualmente en la esquina de Eleodoro Lobos y Bogotá (Caballito) existe un edificio diseñado por un arquitecto HDP, el mismo diseño para la espantosa torre de Catamarca y Alsina (Once). Son pajareras, avisperos, hormigueros o simplemente cárceles con celdas de 2 metros de altura, tanto que da pánico. Sus habitantes locos, durante su presidio muchas veces permanente, optan por las actitudes más anti sociales del mundo: tiran basura desde las ventanas, sea el segundo o el décimo quinto piso, tiran pañales usados (abiertos o cerrados), se ha visto gatos sobrevivir a caídas de cinco pisos, que murieron al impactar contra el suelo... en fin, cosas de gente de ONCE. Es irremediable, saben que pertenecen a nuestro barrio, ansían "volver" a sus raíces; se trata de vecinos cansados de la actitud "careta" del habitante de Caballito que: "se la pasa llamando a la policía en la primera, les silvan y les gritan "¡eh Sucios!"". Existen 3 zonas más en distintos barrios, nos declara la delegada y administradora del edificio de Caballito. Se llama Josefa, pero gusta le digan Jo. Jo declara que están juntando firmas en todo el edificio (19 pisos por 8 deptos. cada uno) para declarar la cuadrícula que les pertenece como nexo de Balvanera. Es impulsora de la iniciativa por una razón personal: Ella nació en Balvanera y desea
remediar el peor error de su vida y por eso quiere mudar, desde lo legal, a sus vecinos sucios y maleducados hacia sus raíces natalicias. Suena ridículo pero es así, de ser tomada en serio con los otros vecinos que luchan por ser considerados como anexados a Balvanera, marcaría un hito en la materia, los especialistas en derecho alertan que si una zona fuera del perímetro de la ciudad elige ser anexada a, por ejemplo el barrio de Once, entonces regirían otros impuestos, codigos postales, empresas prestadoras de servicios, servicios públicos distintos.  Sin embargo la peligrosidad de esta idea abarca la preocupación aún más insistente de los sociólogos y antropólogos sociales; hablamos con una antropóloga experimentada que nos cuenta que "La marginalidad de las villas se trasladaría 'ciudad adentro', el barrio de Once siempre fue menoscabado socialmente por clases sociales altas aledañas, e internas al propio grupo; si la valoración propia de los Balvanerenses se vuelve más fuerte que lo que otros barrios pueden repeler o anular, inevitablemente serán absorbidos en una ola de violencia de pobres que se reafirman de Once y clases medias y altas que estarán sitiadas en su propia ciudad capital." aseveró la antropóloga. La iniciativa de la motivada Jo puede ser una nota divertida, sin embargo las ideas de una superioridad Balvanerense ya disparó la alarma entre especialistas de temas sociales.

EL PESCADO DE LAGOMARSINO

Ante la llegada de la marcha del 18F (F de Fiscal), la sociedad se divide la torta que le corresponde revolearle en la cabeza al otro. El pedazo de gente que se dice de izquierda ya se ausenta a la fiestita de figuretis, mientras que los panqueques de centro están especulando con quién se sacan la fotito: ¿P. Solanas con C. Pando? Neeee, eso no te lo perdona ni la burrada de la gente que te sigue Pino (Op. De Autor). Fuera del cholulaje que se ha convertido la reunión de políticos que luchan contra el olvido, la Plaza de mayo con tanta historia queda chiquita para contener a semejantes bestias del peso pesado en no tener más ideología que el poder por si mismo. Dejando de lado a los amigotes de Cristina, que son negadores crónicos de toda crítica

(acertada o equivocada), no puedo parar de pensar en que todo pasó porque el señor Lagomarsino quiso abrir un negocio de delívery de pistolas y puso su primer sucursal en Puerto Madero. Como sabemos las cosas terminaron bastante mal, Nisman de las 4 balas solo pudo usar una, y para colmo no fue para legitima defensa. Lo legítimo es que todos sospechen de Lagomarsino, pobre pescado. ¡Hasta dijeron que era amante de Nisman!, ¡Pobre!. Pensar que todo este revuelo del 18F (F de Felación) porque Lagomarsino muy posiblemente termine haciendo F en alguna cárcel podrida del país.  

BICICLETA: NO PASARAS

El título no es una afirmación, ni una predicción (ni una arenga del PTS); es un deseo de los vecinos de Once, que en su mayoría votaron al PRO durante 8 años, para que les haga bicicendas que ocuparon con los containers de basura y nosotros con autos particulares, fletes de: supermercados, tapicerías, biyouterias, carnicerías, jugueterías, oficinas fantasmas, tapaderas, kioscos, etc. A nosotros los vecinos de Once nos agrada la zona residencial (digamos Belgrano-Entre ríos -independencia-Sánchez de Loria, las mejor ubicadas), nos gusta el moderado silencio como a cualquier criatura, la tranquilidad sin esos endemoniados muchachos que corren cargando mercadería china, bociferando al chofer para que arranque (y los policías persiguiéndolos para que dejen paso al tránsito). Si, nos gusta la tranquilidad, pero si no la conseguimos nos encargamos de que nadie la pueda conseguir. La ley del Talión en nuestro barrio: hasta los ciclistas de Balvanera se rehúsan a usar la bicisenda, o la usan negligentemente; van a contramano, hacen zig zag, entran y salen de ella, y mejor; juegan a las carreras con el pobre gil que está yendo al trabajo. A todo este panorama los Ogros de capital federal que la creían inútil, por suerte se equivocaron, solo es cuestión de que los miedosos y aquellas personas que aún no saben andar en bicicleta se animen a entrar en el circuito amateur de la bicisenda porteña. La dificultad como en todo deporte que recién comienza en Argentina es que no hay salario para quién lo ejerza; serán los amantes de pedal los que abran este deporte a nivel profesional en nuestras calles de Balvanera. Mientras tanto, dejemos de soñar, ¿qué mundo verde ni que ocho cuartos? Las bicicletas en Once NO PASARAN.

 

 

                                       COSIMO FERRARO EL VERDULERO ITALIANO RETIRADO EN ONCE


Hay que darle la oportunidad a Cosimo de ser conocido, no puede hablarte solo de las verduras que estibó los últimos 60 años de su vida. El ex verdulero tiene un pequeño balcón que da hacia la calle Dean Funes. Con 78 años Cosimo vive de lo que sus hijos le dan, con una excelente salud y sin ninguna pensión se las arregla para vivir.
 Mientras descascara un huevo duro y se lo come me pregunta: ¿Te molesta si manyo?, no preguntaba si me molestaba ver como su boca hacía del huevo una masa blanca, viscosa y repugnante, sino lo hizo por cortesía; no había huevo que invitarme.

  (Periodista)- Usted tiene 78 años, estibó cajones, al menos, 30 años en el Abasto...
(Cosimo)-(que interrumpe con su boca rebosante de huevo duro semi licuado)- 28 años, del 54' al 82', precisamente. (P)- Después de tantos años de trabajo, usted continuó por su cuenta...
(C)-(tomando las riendas nuevamente) Don Bosco y Sanches de Bustamante, con una bola de vagos criándose en mio entorno
(P)–(continué con tono deductivo) y se fue porque no aguantaba los asaltos...
(C)– "Nono" capito pibe, come robo? A Cosimo no le roba niente, me largo cuando me taladran la oreja con esa cumbia de merde! Aguantar la parla de las señoras, hasta ahí Cosimo aguanta (señalando al cielo santo).
(P)- ¿Cuál fue el momento más duro en lo laboral señor Cosimo?
(C) – Tengo un ACV de hace 2 años, paré de darle a la carne, dos meses postrado, duro quedé...
(P)-Señor cosimo, usted hace 2 años ya estaba jubilado, me refiero a duro por doloroso, y laboral es durante el trabajo. (C)-(desorientado toma la iniciativa) Lo duro para mí fue dejar a mio familia de niño, ganarme los cornos di toro por la putana de mia mujer, aprender castigliano de ustedes...
(P)-Y en lo laboral? - Algo irritado...
(C)– Y el cierre del cuore Abasto.
 (P)- ¿Cuore abasto? Se refiere al Abasto.
(C)– Mia verdulería se llamaba El Corazón, porque estaba en el cuore del Mercado di Abasto, Bernardo, "Jioryo", Pedro el catalán, amigos míos ya finadi-sisimos también sufrieron el cierre, decidí irme porque ya sabía iba a morirme de tristeza si veía como en el 84' arrancaban esos mostri del gobierno nuestros sueños, nuestra forma de vivere
(P)- Usted abandonó, y no quiso volver más.
(C) -Cuando en año 61' pude asentarme empecé con mi amigo de infancia "Jioryo" haciendo migas, ganando poco. Pedro, que conocimos mientras cargábamos cajones, venía de pasar hambre con Franco en España y añoraba ver grosos filetes de carne, así que

el Cuore de manzana se hizo de carne también, temiendo que en la aventura Pedro nos deje sin mercadería, era, es, fue, goloso. Frondizi, hermoso apellido, "avere morbida" la mano, hombre manso y ferreo, sangue italiano . "Io" cuando no entiendo siento desesperazione, y eso me causa la politica. Vi que pasa con ese hombre en el 62', el argento Benito (mussolini), don Perón le da apoyo, y ahora el mundo se le viene abajo.



 (P)-¿Como se relaciona la politica del 62' con su vida laboral en el Abasto? 
(C) – Io no se. Posso leer, y escribir i numeri ma non escriviere correttamente. "Avere un' impresioe interna", tengo impresión dentro mio, que en este pais io estaba condenado a ser pato de desplume. Cuando la gente alcanza creer algo, esto se desploma dejando ver la madera podrida dentro. Militares, hiper  inflación, partidos traidores, nadie en quien confiar, bombas, disparos, miedo, opiniones únicas... y yo vendiendo comida a todos ellos, al pibe que patrulla con su fusil, al posible entusiasmado con la vuelta del Benito argentino, a la gorda de cinco críos que sabe de todo lo que no importa, al niño inocente que me pide fiado porque el papá no tiene laburo...
(P) – El mercado era inmenso, ¿Usted fiaba?
(C) -El nene era vecino, venía a tocarme el alma con sus ojos. Mis fillios jugaban con él, eran amiguitos, yo no tengo cara para decirle que no a un nene así.
(P) – Volviendo al trabajo, del 61 al 82 usted tuvo su puesto, trabajó con sus amigos y luego tengo entendido se fueron independizando, ¿Pero porque abandona en el 82 y no en el 84 como la mayoría con el cierre del Abasto? ¿Porqué no va a continuar en el actual Mercado Central?
(C)- Después de tantos años, 27, 28 años ya no hay fuerza para empezar de cero, mis hijos grandes, trabajan por su cuenta, yo ya me sentía derrotado en el Abasto; nosotros trabajábamos a conciencia, y los monopolios siempre rompen esa conciencia.
(P) – Se refiere al monopolio que por ley obtendría el Mercado central para abastecer a la Capital Federal?
(C)- Si. Irme fue duro, pero supe que moría de depresión si veía con mis ojos el cierre. Por eso del 82 al 84 dejo esta casa a mi mujer, la desgraciada que me puso los cuernos, y me voy a vivir lejos.
 (P)– Pero vuelve ¿Verdad?. (C)– Comerciantes amigos me llevan de viaje, prueban suerte, me prestan capital, pero io no soy nómade y ya estaba cansado, aunque la capital tampoco sea mi hogar, volví.
 (P)– ¿Y el Abasto? ¿Estuvo antes del cierre?
(C)– Miento si digo que no fui a ver a los muchachos. Y Cosimo no roba ni miente. Jamás. He tenido taquicardias, y el vino ya no me hacía

efecto. Fui una semana después del maldito cierre. Fue un campo de batalla, la trinchera que mi abuelo me contaba de niño. Los despedazados cajones de frutas, las bolsas de arpillera, algunos camiones estacionados en 45° aún, los bares a medio llenar, parecía algo fantasmal, algo de otro mundo; mientras el resto de la ciudad seguía como si nada, mi corazón se estrujaba por ver tanta miseria, los chicos que antes levantaban verdura, hoy recorrían las rejas perimetrales buscando tesoros imaginarios. Llegué a asomarme para ver un enorme hueco solo interrumpido por columnas que sostenían el techo y más arriba el abovedado acabado del Abasto. Olor a vino, a podrido, y a un asadito que los muchachos desempleados en ese momento hacían en la calle empedrada. En sus caras vi la inocencia del campesino, ¿así era yo de picolo? Si mi madre viviera y pudiese mostrarle el recuerdo de aquellos jóvenes sucios le preguntaría si yo era así. Ellos pensaban que esto era transitorio, que el mercado volvía, que el Hogar Obrero se haría cargo... Antes de irme agarré las rejas con mis manos como si quisiera arrancarlas, pero ¿Para qué? Me pregunté durante años, si las arrancaba solo iba a entrar en un esqueleto penumbroso, de ratas y recuerdos; mi cuore del Abasto ya no estaba allí.

 (P)- El Hogar Obrero amaga del 87' al 93' recomponer al Abasto, lo vende a la mega inmobiliaria IRSA que hace el Shopping Abasto. ¿Que opinión te merece el presente? (C)- Al abasto he ido 2 veces, una cuando inauguran la peatonal Carlos Gardel, no me gustan las limosnas, Cosimo no da pena. Jamás. Y la segunda con mis hijos, al Cine. Esta gentuza destruyó el viejo mercado de Lavalle, siento como una burla a mi memoria que dejen solo la fachada del viejo mercado para poner sus modernas estructuras detrás.







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